Energía solar térmica

A diferencia de la energía fotovoltaica (PV), la energía solar térmica (ST) se utiliza para generar energía térmica. Los módulos utilizados para ello contienen un líquido especial, a menudo llamado fluido solar. La mezcla de agua y anticongelante transporta el calor a través de un circuito a la casa y a un acumulador de calor. A continuación, se conecta a la red de agua de la casa, por ejemplo. Una vez que el fluido se ha enfriado de nuevo, se introduce de nuevo en los colectores solares.

También existe la opción de convertir el calor generado en energía eléctrica, aunque esto no suele merecer la pena dada la disponibilidad de sistemas fotovoltaicos.