Módulos solares en la prueba de resistencia: Pruebas de amoníaco y niebla salina

Para garantizar que el rendimiento de sus módulos no se degrada excesivamente incluso en condiciones ambientales difíciles, la mayoría de los fabricantes de módulos solares realizan actualmente pruebas de amoníaco y de niebla salina.

Módulos solares en los tejados de las granjas: pruebas con amoníaco

En los tejados de las granjas, los módulos pueden estar expuestos a altos niveles de amoníaco, especialmente si están integrados cerca de los respiraderos o en el propio tejado. Si entonces se forma condensación en combinación con una alta humedad, el amoníaco puede resultar problemático. Mediante un procedimiento normalizado, TÜV Rheinland y la DLG comprueban la resistencia de los módulos en un entorno con amoníaco. Los factores decisivos para superar esta prueba son, entre otros, que el rendimiento no disminuya excesivamente, que no se produzcan daños visibles y que el aislamiento esté intacto incluso cuando se moje.

Módulos solares en zonas costeras: Pruebas de niebla salina

En las zonas costeras, los módulos de PV están expuestos a niveles de aire salino superiores a la media. En las pruebas de niebla salina según la norma IEC 61701, los módulos se exponen a una niebla salina durante 96 horas en un entorno de laboratorio con una inclinación de 15-30° y una temperatura del aire de 35°C. Las comprobaciones posteriores (aislamiento en condiciones de humedad, inspección visual y otras) detectan signos de corrosión en los orificios, las uniones atornilladas y las conexiones eléctricas.